A la maestra con cariño

LaSofer es la gran petera del grupo y además de tenerla bien clara a la hora de chuparla, nunca se guarda sus secretos. Por suerte para nosotras, comparte sus conocimientos. Nosotras, agradecidas, intentamos mejorar el delicado arte de comerla entera.

Esta última mamada te la dediqué a vos, amiga y gran maestra.



La agarro segura, con ganas. Mi boca la empieza a chupar. Primero la cabeza, suave. Mi lengua la saborea decidida a comérsela.

Llego hasta la base y siento cómo crece dentro de mi boca. Se pone bien dura; la chupo mejor.

Lo pajeo. Con la lengua descubro sus testículos. Los saboreo despacio. Recorro toda la superficie hasta llegar a su culo: le meto la lengua.

Está tan caliente que me dejá hacerlo, lo disfruta. Vuelvo a meterla toda en mi boca. Me atraganto, pero nada importa. 


Acelero el ritmo. Loe pajeo, me la como entera. Lo miro mientras no paro de chupársela. Me gusta hacerlo.

Quiero que acabe en mi boca. Siento cómo se retuerce de placer. Gime. Falta poco. Ya se va.

No le doy descanso. Hoy su pija es mía.

Sabía, estaba cerca. Toda mi boca se llena con su semen. Tibio, rico. Lo trago, disfruto de su aroma.

La agarro mientras sigue temblando. Con mis dedos la presiono de la base hasta la punta. Entonces sí, ahí está, la última gota. Paso mi lengua, después de todo, me lo merezco.